25/5/09

Chocolate blanco

Rubia, chocolate blanco,

te sienta bien tu nuevo peinado,

cada día me gusta más.

Mi principal anhelo matutino

pasa por tener la opción

de hallar un subterfugio,

una suerte de recado

que me obligue a transitar

por delante del lugar donde trabajas,

y tengo tan controlado tu horario

que a veces me sorprende no encontrate.

Nunca hasta hoy te había visto

con esos pantalones anchos;

no me convencían en un principio

pero su tela es tan fina que

seguro que en tus bajos percibes el aire

fresco de esta mañana pre-estival.

Me abstraigo en esa tela y en lo grata

que debe de resultar al tacto

si lo que hay debajo es ese tierno

y fresco bollo gracias al cual

no hay momento malo para masturbarse.


J.P.